CIERTO DESASOSIEGO

«Judith»

De vueltas con nuestro referente más habitual, Gustav Klimt.

Tenía que realizar un ejercicio con colores primarios, así que aproveché para volver a trabajar sobre uno de mis pintores favoritos.

En este caso, cierta dureza en la expresión y en los rasgos faciales contrastan con el color vivo  y la calidez del tratamiento de la piel.

Postura imposible, combinación de dureza y dulzura, muy femenino y algo masculino. Todas estas contradiciones son las que intenté plasmar.

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